Los árboles
de navidad artificiales, aunque duran muchos años, no son para toda la vida y
con el tiempo pues se acaban
estropeando, el plástico se debilita, las ramas se
rompen y claro, terminan en un contenedor.
Pues aquí os
doy una idea para reciclarlos.
Siempre hay
partes que se pueden salvar de ese trágico final, y como este abeto tiene unas
ramas muy chulas enseguida se me ocurrió recuperarlas para hacer un centro de
navidad muy campestre.
1- Empezamos
seleccionando las ramas que se puedan aprovechar y las sujetamos entre ellas
con unas bridas oscuras que intentaremos disimular para que no se vean.
2-
Nos damos un paseo por el monte y recogemos piñas de tamaño pequeño, no
dejaremos pasar las que ya están roídas por las ardillas, quedaran muy bien
combinadas con las otras.
Les haremos unos pequeños agujeros en la parte posterior para introducir
un alambre con el que poder sujetarlas a las ramas.
3-
Unas pequeñas frutas, en este caso peras y manzanas
artificiales pero muy realistas y unas ramas de bolas rojas, en este caso de
acebo, también artificiales, darán un toque de color.
4-
Un bonito
candelabro con una vela y listo para adornar.
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